Anoche fui al cine a ver esta película.
Trata sobre un experto en tasaciones y subastas de arte.Un profesional muy bien establecido y reputado.
Un hombre extremadamente culto,extremadamente rico y extremadamente...solo.
En su vida personal,Virgil Oldman vive encerrado en sí mismo,con problemas para relacionarse con el resto del mundo,con manías especiales...
Pero a raíz de un encargo su vida da un vuelco.
Virgil,una extraña mujer,las piezas de un mecanismo de ruedas dentadas,una mansión decadente...
...son algunas de las piezas con las que Tornatore hila con elegancia una película de estructura narrativa sencilla a la que se van añadiendo giros inesperados.Un drama de intriga y también una historia de amor.
La introducción de un viejo autómata del siglo XVIII en el argumento despertó mi curiosidad.Siempre me ha atraído ese tema.
En esta ocasión llama la atención que a medida que la construcción del humanoide avanza,el personaje de Virgil ,que en realidad vive como un autómata,se va humanizando.
La interpretación de Geoffrey Rush es magnífica.Los gestos contenidos pero tan expresivos,la manera de caminar,como se pone los guantes,la forma de hablar,esa mirada...un 10.
Os dejo esta frase de la película.
No os cuento más porque cualquier detalle puede destripar el final.
La puesta en escena es elegante,el vestuario (Armani,Brioni,...) muy acertado,la fotografía cuidada y la música (Ennio Morricone)acompaña muy bien.
Quizá eliminaría algo de metraje y algunos detalles algo previsibles.
Pero me hizo pensar...y eso...siempre es bueno.
Y ahora me voy corriendo a ver la lluvia de estrellas.
Besos,muchos,
Carmen.
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